-Te quiero.
-Repitelo.
-Te quiero.
-Repitelo.
-Te quiero.
-Vuelve a repetirlo.
-¿Para qué?
-Tú sólo dilo.
-Te quiero.
-Es alucinante como la gente miente tan bien, y lo crédulos que somos los demás.
-Repitelo.
-Te quiero.
-Repitelo.
-Te quiero.
-Vuelve a repetirlo.
-¿Para qué?
-Tú sólo dilo.
-Te quiero.
-Es alucinante como la gente miente tan bien, y lo crédulos que somos los demás.